Solicitar una hipoteca no significa “amarrarte” a una deuda a largo plazo que limite tu estilo de vida, estudios, viajes, adquirir un auto u otros planes. Si eliges el crédito correcto, podrás seguir cumpliendo tus proyectos y adquirir esa casa en venta.

¿Por qué no lees estas reglas básicas para adquirir una casa propia y hacer dinero con el dinero de otros, es decir, con el capital de las instituciones financieras?

  • El porcentaje idóneo que debes destinar a tu crédito hipotecario es el 20% sobre el ingreso neto mensual (después de impuestos) y el tolerable es 30%. Te recomendamos no pasar del 25%, pues así tendrás dinero disponible para algún imprevisto.
  • Destina el mayor monto posible al enganche. Entre más dinero proporciones en este rubro, el crédito será menor, por lo que la mensualidad bajará y en la totalidad de la vida del crédito pagarás menos intereses.
  • Antes de elegir, compara al menos tres hipotecas de distintas instituciones. Recuerda, no hay créditos buenos o malos, sino los correctos para tu perfil.
  • Elige un crédito en pesos, esto te da certidumbre en el monto a pagar durante toda la vida del crédito.
  • El crédito más barato no es el que ofrece el CAT o tasa de interés menor, sino el que en todos sus aspectos te conviene como, el monto que te van a financiar, la moneda y el plazo.

Piensa y opta por aquellas hipotecas con mejor amortización, ya que te permitirán en un mediano plazo vender esta primera casa, saldar lo que aún debas y con el remanente dar un nuevo enganche para una casa que cubra mejor tus nuevas necesidades de vida.

Casa de Hipoteca
Casa de Hipoteca

Las hipotecas en las que amortizas más capital en cada pago, suelen resultar las más baratas al final de la vida del crédito. Solicita la tabla de amortización y compara entre créditos qué porcentaje de tus pagos mensuales realmente será para pagar la deuda.

Contrata un crédito con tasa fija, esto te da certeza de cuánto vas a pagar durante toda la vida del crédito y te permitirá tener tus finanzas estables. Considera que la tasa fija no significa que todos tus pagos mensuales son iguales, puede haber variación, sin embargo, desde que firmes el contrato sabrás cuánto te corresponde pagar cada mes.

Recuerda que siempre es mejor ahorrar e invertir en patrimonios que valgan la pena, evalúa el esfuerzo y el beneficio.